"Los políticos y los pañales se han de cambiar a menudo... y por los mismos motivos."

Sir George Bernard Shaw

domingo, 31 de enero de 2010

Auto clave.

Somos muchos los que llevamos años indignándonos al leer como crímenes monstruosos que dejan a Hitler o Stalin como amas de cría, son castigadas con condenas irrisorias y que además no llegan a cumplirse en su totalidad.

Toda acción para corregir este despropósito y aberración parecía condenada al fracaso y a la impotencia, de tal modo que parecía que la única salida a este estado de cosas era la resignación y la ira más o menos contenida.

Pero una luz se ha abierto entre los negros nubarrones merced a una sentencia reciente de la Audiencia Nacional y que acaba de ser confirmada por el Tribunal Supremo.

Los hechos condenados fueron cometidos por dos practicantes contumaces de la kale borroka. Ambos, hace ya tres años, tuvieron a bien cruzar en una carretera navarra dos contenedores de basura. Obstáculo que obligó a un vehículo a dar un brusco frenazo. El conductor indignado se dirigió a continuación a denunciar los hechos a la Policía Local del lugar, lo que motivo que los condenados la emprendieran a pedradas con el automóvil del denunciante.

No pasaron de ahí los hechos, pero la condena consistió en un año de prisión, una multa consistente en pagar 10€ diariamente durante ese año, e indemnizar al conductor obstaculizado con 810€.

Esa condena ha sido ratificada por el Tribunal Supremo, y cuando uno la compara con otras que ni han merecido la atención de los diversos jueces, encuentra que la única posible diferencia es la presencia del elemento del daño a un automóvil.

Por tanto sugiero a los abogados acusadores de los Juana de Chaos, Rafitas, etc. de turno, que cuando vayan a elaborar el escrito de acusación respectivo tengan buen cuidado en fijarse si entre los elementos dañados: seres humanos, viviendas, cuentas bancarias, elementos urbanos, etc. se halla algún artefacto motorizado. La dureza de la condena debería verse considerablemente aumentada.

A partir de ahora Sherlock Holmes ya no deberá empezar buscando el móvil del crimen, sino el automóvil.

domingo, 24 de enero de 2010

MILANA BONITA

Éramos muy jóvenes. Éramos una familia feliz. La transición no nos tocaba ni de cerca. Si, tendríamos problemas económicos, como no, como el resto de los trabajadores de España, pero solidariamente se superaban, con amor en las familias, fueran estas de la tendencia ideológica que fueran.


“Los santos inocentes” fue un punto de inflexión para la sociedad de este país. Cuando la exhibieron en televisión, cientos de voluntades, miles de opiniones, millones de sentimientos estallaron en todas las direcciones.

Pero en mi hogar, a lo más que llegaron mis padres fue a llamar “el niño chico” a mi hermano Raúl, un gamberrete hoy de 36 años, padre de familia responsable como el que más. Tal vez, sólo tal vez, en mi caso, fue uno más de los alicientes para militar en la izquierda sindicalista de aquellos tiempos.

Desgarradora película, dolorosa, hermosa, pero que para los míos sólo significo algo que ya pasó, superado, vencido, por las voluntades y el trabajo de unos y otros.

Hoy, mientras escribo estas líneas, vuelvo a ver el mencionado film, y poco falta para derramar las lágrimas de la nostalgia de aquel hermoso tiempo.

Hermoso, si, que en mi adolescente entendimiento, enardecía las ansias de libertad, fraternidad e igualdad... Y más tarde hundidas y defraudadas al descubrir que, para los sindicatos de clase la justicia social, únicamente se distinguía en el color del tapizado de la poltrona que ocupaba el sindicalista “de clase” de turno. Que los políticos al uso, una vez alcanzado el objetivo del poder, dormitan en sus escaños, sin levantar la voz en defensa de los intereses de sus electores.

Pero mis padres, que habían crecido y mamado la dictadura, reían, sufrían y gozaban de sus hijos, de su vida.

Hoy contemplo las imágenes del magistral Paco Rabal, “milana bonita”, acompañado de lo más granado de la esfera del cine de nuestro país, Alfredo Landa, Terele Pávez, Agustín González, Juan Diego, etc. y tengo la certidumbre de que si Juan, el fontanero, mi padre, hijo de un voluntario en la batalla del Ebro, hubiera sufrido aún la metralla que su progenitor, mi abuelo, llevó en la pierna derecha hasta su muerte, ya la habría perdonado.

La niña chica, murió, como la guerra, sucumbió la dictadura y matamos a la transición, entonces, por favor, déjennos decir y optar libremente, color y decisión, amor sin odio, no nos hagan seguir subiéndonos a las ramas de un árbol para agitar “la milana bonita”

“QUIA, QUIA, QUIAAAAAAAAAAAAAA....

MILANA BONITA”

domingo, 17 de enero de 2010

Barbas.

Hay que reconocer que últimamente a ZP no le sale nada bien, pero es que cuando se dice nada es que nada.

Día tras día está comprobando como el P.P. va cogiendo ventaja sin hacer prácticamente nada. Parece ser que Rajoy ha dado la consigna de que si el gobierno no hace nada, para qué lo van a hacer ellos. Las meigas deben haberle aconsejado que con conectar el piloto automático e ir al tran, tran, la Moncloa es cosa cantada.

Pero es que ahora esa formación política que olía a cadáver desde hace tiempo se va a ver relanzada en sus expectativas tras el desaguisado del FBI usando una imagen de Llamazares para hacer un retrato robot de cómo sería Ben Laden hoy en día.

Llamazares se lamenta y protesta por tal chapuza, pero en su fuero interno no puede contener el alborozo por la manera inopinada y barata con que ha vuelto a la palestra nacional.
Seguramente en la Moncloa reflexionarán acerca de lo amargo que es probar la propia medicina.

Y eso que no hay ni punto de comparación entre el favor que en su momento hizo Ben Laden hace 10 años y el disfavor que ahora le ha propinado merced a las barbas de Llamazares. Es lo que tiene el emplear armas sucias, que en cualquier momento el tiro puede salir por la culata.

Cuando el político español ha querido buscar lo negativo del empleo de su imagen, no se le ha ocurrido otro motivo que se sentiría inseguro si viajara a EE.UU. Realmente no sé si el FBI es consciente de que posiblemente sería más peligroso para la seguridad nacional estadounidense la visita del médico logroñés que la del proscrito multimillonario saudita.

domingo, 10 de enero de 2010

LA SILLA DE RUEDAS

Esta mañana salí a pasear como de costumbre con el perro, y, tras un recodo de mi calle, pude contemplar una silla de ruedas destrozada literalmente. Piezas sueltas por todos los lados, el respaldo rasgado, en fin, inservible de todas, todas.



Averiguando sobre el origen de tamaño despropósito, el portero de una finca cercana me ha puesto al corriente. Resulta que la usuaria original del artefacto era una anciana residente, junto con hijo, nuera y nietos en el edificio en el que él trabaja, que, consecuencia de la edad, los estragos navideños o de la “exquisita educación” de sus descendientes, ha fallecido recientemente.


Los herederos directos, esto es, hijo y nuera, seguramente con la intención de despejar la casa de trastos ya inservibles, encomendaron a su vástago que se ocupara de la mentada silla, y este, haciendo honor a la pinta de cafre que muestra, pidió ayuda a la jauría de semejantes que habitualmente le acompañan en la muy honesta misión de ensuciar la calle, trasegar ingentes cantidades de alcohol y otras sustancias y alterar el orden en el barrio.


En serio, ya me cansa comparar juventudes, criticar padres y formadores, y todo lo que se refiere a la mala educación de las más recientes generaciones, y pánico me da solo pensar en el futuro de nuestra sociedad. Vamos jodidos si son estos los que han de pagar nuestras pensiones.


Realmente, el motivo de la presente entrada es la irresponsabilidad de la administración de Esperanza Aguirre a la hora de gestionar los fondos públicos. Porque, la silla de ruedas protagonista de la heroica acción de estos gamberros, fue financiada por el SERMAS, Servicio Madrileño de Salud, como miles de otras, que graciosamente, se facilitan a personas que en un momento determinado las necesitan realmente.


El sistema empleado es el siguiente: primero el demandante del aparato paga el importe del mismo, para que después de un par de meses, se le reintegre el importe integro, SIN COMPROMISO NINGUNO por parte del beneficiario de cuidar un bien que él no ha pagado, sino el conjunto de los contribuyentes. Así podemos encontrar casos como el aquí relatado, o en ocasiones, personas que una vez que ya no precisan del instrumento en cuestión, (andadores, muletas, aparatos para la respiración asistida también se facilitan por el mismo método que las sillas de ruedas), tienen la desvergüenza de ponerlos a la venta.


La sanidad pública es deficitaria por múltiples causas, alguna achacables a la administración central como por ejemplo, la insuficiente financiación a través de los Presupuestos Generales del Estado, el cómputo a la baja de la población asistida en la Comunidad de Madrid o la completa ignorancia de los ciudadanos que aquí son asistidos de otras Comunidades.


Pero, por favor, Sra. Aguirre, gestione mi dinero con más coherencia, y de paso eche un vistazo a quien tiene cuidándole el gallinero, no sea que tenga algún zorro...


O alguna zorra.

domingo, 3 de enero de 2010

Cuando las barbas de tu vecino veas pelar...

Anda el mundo occidental algo revuelto tras la ejecución de un ciudadano “británico” por tráfico de drogas en China, nada menos que cuatro kilos de heroína portaba Akmal Shaij.

Lo que sucede es que lo chinos cuando se ponen a algo se hacen los suecos, y el traficante ha sufrido la pena capital.

Lo primero que llama la atención es el nombre del ajusticiado, evidentemente no corresponde a un anglosajón al uso, sospecha que se confirma en cuanto se ve su foto.

Y como más de uno ya estará presto a llamarme racista por hacer esa diferenciación, pero estimo que más bien los racistas son ellos.

Cada año son cientos los ejecutados por los más diversos motivos: tráfico de drogas, actividades separatistas, adulteración de alimentos, actividades contrarrevolucionarias, etc. pero parece que el mundo sólo se altera cuando la víctima es europea o tibetana.

El gobierno británico ha ejercido toda la presión de la que ha sido capaz, pero China es mucha China, y sabiendo que siendo como es a la vez gran potencia militar, gran potencia comercial y un más que atrayente mercado, ha ejecutado al supuesto traficante como podría haber ejecutado a treinta más.

De momento el embolado ha recaído sobre el Reino Unido, pero tarde o temprano nos tocará a nosotros. Son muchos los españolitos que en todo momento están deambulando por el mundo, y hasta ahora todo se ha saldado con condenas carcelarias más o menos largas y los que han sido condenados a muerte se han salvado por los pelos.

Pero hay que tener en cuenta que estas complicaciones se van a multiplicar en el futuro.
Está claro qué individuos se están introduciendo entre los españoles que están adquiriendo tan digna condición por nacionalización, y bien sabido que aquí no sucede como en otros países en que se debe pasar un examen de idioma, de cultura del país de adopción, que se verifican los antecedentes penales, etc. Tarde o temprano estos nuevos españoles se van a meter en verdaderos embrollos en los que el gobierno español de turno las va a pasar canutas para salir bien librado, aparte del enorme coste económico que supondrá: gastos judiciales, favores comerciales al país empeñado en dar el correspondiente matarile, etc.

Así que sugiero que al igual la ley española actualmente discrimina entre los españoles de origen y los nacionalizados, en el sentido de que los primeros no pueden en ningún caso ser desposeídos de su nacionalidad y los segundos sí, podría establecerse que cuando uno de estos recientes españoles recién cometa algún delito con culpabilidad notoria y clara, sea desposeído de su nacionalidad y por tanto de todo derecho a protección económica, jurídica y consular.

Más vale ahora que cuando sea demasiado tarde.