"Los políticos y los pañales se han de cambiar a menudo... y por los mismos motivos."

Sir George Bernard Shaw

domingo, 29 de noviembre de 2009

LOS OTROS

Semana curiosa, por lo menos, en lo que a la actualidad social y política se refiere.



Mientras, el pasado miércoles se conmemoró, que no celebró, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia de Género, justificadísima en tanto en cuanto sólo en nuestro país han muerto en lo que va de año 54 mujeres a manos de sus parejas, el jueves se rechazó, con el voto de 183 diputados de ocho partidos, las enmiendas para devolver al Gobierno el proyecto que reforma la Ley del Aborto. Paradójico suena, que, lloren tanto las muertes de medio centenar de personas, y al mismo tiempo, se celebre con abracitos, risitas y besitos entre las ministras el plácet concedido por el Congreso al asesinato de más de 122.000 “seres humanos” al año en España.


Porque, dejando a un lado las consideraciones religiosas, o éticas, o las payasadas del saltimbanqui ése de Pepe Bono, que intenta justificar lo injustificable con acusaciones a la Iglesia a la que dice pertenecer, no hay más que leer a los verdaderos expertos en el tema, médicos y juristas, que denuncian el daño que produce la realización de la “Interrupción Voluntaria del Embarazo”, estúpido eufemismo que los roji-progres utilizan para, quizás, lavar sus conciencias del cruel final que en realidad supone para decenas de miles de niños y ¡ojo!, niñas también, año tras año.


También resultó chocante la inusitada “unidad de la prensa escrita Catalana, al publicar el mismo editorial los doce medios más significativos de esta región, con el claro objeto de presionar al Tribunal Constitucional ante la ¿inminente? sentencia pronunciándose sobre el Estatuto prometido por el presidente Rodríguez Zapatero, que ha de dar a conocer en los próximos días... o semanas... o meses... Raro, a fe resulta, que ni tan siquiera el 23-f, la fecha que más pudo poner en peligro su hermosa democracia del cuarto poder, se atrevieron a una medida tan desacostumbrada, como lo es unificar tan dispares líneas editoriales.


Claro, ¡cómo no!, el gilipollas de Laporta tuvo que salir haciendo el ridículo, como de costumbre, a dejar en evidencia a uno de los equipos más grandes de Europa, y veremos que fiestecita prepara hoy en el partido frente al Real Madrid... No imagino cómo se sentirán los millones de aficionados culés de fuera de Cataluña, o mejor, los catalanes que no compartan la paleta ideología del presidente de su equipo.


En estas dos historias, que, aparentemente no tienen nada en común, los que pierden, los no nacionalistas y los no nacidos, son LOS OTROS.

domingo, 22 de noviembre de 2009

Agua caliente.

Sostiene el checo Milan Kundera que el régimen ideal para vivir un creador es una dictadura en fase de descomposición.

Se basa para ello en analizar lo que sucede cuando no se halla uno en una sociedad de esas características.
Cuando el ciudadano se halla inmerso en un estado omnipresente, omnipotente, omnisciente y omnicontrolador, el individuo siente que nada puede hacer por liberarse, se vuelve un eslabón de la cadena, un ladrillo más y todo aliciente desaparece de su vida. Sólo queda nacer, crecer, reproducirse y morir. Todo acto liberador, creador o trasgresor es exterminado de raíz cuando sólo es un embrión. Toda esperanza es vana y es perseguido hasta el pensamiento más oculto.
Puede ser en cambio que la persona se encuentre en un sistema político donde se busque proteger todos los derechos, todas las libertades y se persiga con saña cualquier tipo de discriminación real o fingida. En este caso uno se halla rodeado de una atmósfera, por supuesto más benigna que la anterior, pero igualmente inhibidora y apática. Se crea la imagen de que cualquiera puede triunfar, cualquiera puede crear y prosperar. Sólo existe el condicionante de lo políticamente correcto. Esa omnipresente y férrea ley no escrita que impregna todos los resortes de la ciudadanía moldeando y dirigiendo todos y cada uno de los actos de los habitantes.
Se produce una autocensura en la que el artista ya sabe lo que puede hacer, cuáles son los límites y qué temas tabúes se han de evitar a toda costa para evitar el ostracismo y no perderse la subvención de turno. Se llega a la paradoja de que lo políticamente correcto es declararse políticamente incorrecto. Gracieta que el sistema consiente benevolente y sonriente.
Falta ahora que autores, creadores y artistas, que al fin y al cabo tienen más deber de mover y animar a la sociedad que los políticos (Al político se le elige cada cuatro años, al creador cada vez que se compra o piratea un libro, disco o película) se den cuenta de que se hallan en la situación aquella de la rana que salta del agua hirviente al caer en ella, o se cuece si el líquido es calentado poco a poco. Pero también hace falta que el consumidor de lo creado sepa hacer hace que el artista haga lo que él quiere y desea, no lo que al Estado mecenas le interesa que se consuma.
Hay elementos para creer que está dictadura de lo políticamente correcto se esté empezando a descomponer para que la relajación de la censura permita la ironía, el escribir entre líneas o el sugerir sin mostrar. Así que animamos a escritores, dramaturgos, cineastas, periodistas a salirse del agua que se está calentado para que a continuación espectadores, lectores y público en general se puedan librar de perecer cocidos.
Y todos podemos hacer algo mayor o menor. ¿Qué espectáculo más trasgresor y rompedor hoy en día que la viejecita que se persigna al salir a la calle o el que se entretiene en el metro con un libro en vez del ipod?

domingo, 15 de noviembre de 2009

LOS EXTREMEÑOS SE TOCAN

La semana se ha presentado calentita, mejor dicho, húmeda, a cuenta de la ingeniosa ocurrencia de alguna descerebrada ¿responsable? En la Junta de Extremadura. Financiado con fondos públicos, ojo, escrito con una ele entre la be, que no uve, y la i, 14.000 euros del ala, el taller está dirigido a jóvenes y jóvenas de entre 14 y 17 años, al objeto de que se soben las partes pudendas con académica eficacia. Doña Laura Garrido, la impulsora de tamaño despropósito, dice no entender el escándalo que se ha formado y afirma que el objeto del mismo es "construir un espacio de intercambio y participación; facilitar la adquisición, desarrollo e interiorización de hábitos saludables, autoestima y seguridad; y analizar las discriminaciones de género que se dan en el ámbito de la sexualidad".



Teniendo en consideración que la Comunidad Extremeña cuenta con una proporción de un funcionario por cada cuatro habitantes, sería de comprender la iniciativa, siempre y cuando se entendiera que la calificación final del mencionado taller, contará en las pruebas de selección para entrar en la Junta, dado el grado de perfección que los alumnos habrán alcanzado a la hora de tocarse los cojones.


En otro orden de cosas, creo que los herederos del insigne literato, fallecido accidentalmente al colisionar con una bala en su nuca en un pueblecito desconocido por los “históricos memoriones” llamado Paracuellos del Jarama, qué digo literato, futurólogo, Muñoz Seca, deberían pedir a la SGAE derechos de autor, pues ya lo vaticinó hace un porrón de años, cuando publicó una obra suya con el visionario título de “Los extremeños se tocan”.


Por supuesto, gran parte de la sociedad clama por el estimulante cursito, llegando un conocido sindicato a querellarse contra los organizadores del mismo, por entender que se pueda tratar de corrupción de menores. La única pega que encuentro yo, en mi humilde entender, a la, por otra parte muy justificada denuncia, es el nombre de la organización querellante, Manos limpias...


Sea como fuere, me queda la esperanza de que aquellos púberes inscritos que decidan hacer novillos, se encierren el los lavabos del centro docente, (por cierto, ¿dónde se impartirán las clases, en un aula al uso, en un cine x, o tal vez en cualesquiera de los centros de ocio nocturnos que “tal vez”, digo sólo “tal vez”, frecuentan los mandamases autonómicos de las tierras de Pizarro?), y en la soledad de cuarto de baño, se dediquen a mirar a escondidas textos de Historia, Matemáticas... o Ética.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Más agujeros.

Hay cosas que cuesta comprender. Desde hace muchos años se lleva discutiendo si se debe desenterrar o no a Federico García Lorca. Se ha preguntado a la familia, han hecho falta innumerables autorizaciones judiciales, múltiples trámites administrativos, y todavía el asunto tendrá múltiples avances, retrocesos y vicisitudes de todo tipo.
Mientras se ha sabido que en la Sierra de Guadarrama se hallan los restos de Suñol, un presidente del Barça en tiempos de la II República.
Parece ser que durante la guerra tuvo a bien acercarse al frente para ver cómo aquello, y así se lo indicó a su chofer.
No está muy claro si es que se despistaron o que el chofer le traicionó, pero cuando descendió del auto se dirigió a los primeros soldados que vio exclamando vivas a la República y gritos de similar jaez.
Debía andar mal de la vista el presidente blaugrana, porque los interpelados resultaron ser soldados nacionales que al verse saludados de tal manera, no se les ocurrió otra cosa que fusilarlo en el acto.
Ahora anda la revista Sapiens, una suerte de Muy Interesante pero en catalán, excavanado por la zona para dar con sus restos. La familia se desentiende, el Barça muestra cierto interés y los partidos independentistas sigue el asunto con interés, aunque de momento no se ha encontrado nada salvo algún que otro casquillo.
Llama la atención como alguien sin encomendarse ni a Dios ni al Diablo puede ponerse a excavar sin autorización alguna, y más en un sitio tan protegido como debe ser la montaña. Pero hace tiempo que se sabe que la ley aquí no es igual para todos. De todas maneras, a ver si le encuentran pronto y dejan de masacrar la sierra con sus agujeros y su presencia.
Y como deseamos que den con los restos del Sr. Suñol lo antes posible, adelantamos una posible pista: El presidente culé (ignoro si entonces ya se les llamaba culés) dio con aquellos soldados del Aleti que protagonizaron aquel anuncio tan famoso en que un miliciano rojiblanco dejaba libre a un soldado nacional también rojiblanco, que al verse importunados mientras compartían recuerdos y anécdotas futbolísticas se quitaron al pesado por la vía rápida.
¡Ah! Me imagino que el chofer era bisabuelo de algún ultrasur.

domingo, 1 de noviembre de 2009

HALLOWEEN

Limpiándose la tierra que cubría casi por completo sus ropas, se contempló con asomo de masculina coquetería el rostro en la superficie de una lápida limpiada recientemente. Se atusó el bigote, y, enderezando el sombrero de ala ancha, caminó fuera del camposanto.


Quiso enterarse de las novedades que en el nuevo año habían acontecido, mientras esperaba un carruaje o cualquiera otro de los medios de transporte que en el siglo fueran costumbre. Recogió de forma majestuosa un diario de una papelera, pero, no entendió nada de lo que allí se relataba. Se hablaba de corrupción, de un tal Gallardón o de una dama llamada Cajamadrid, que sin duda debía ser una de las más hermosas de las hembras del Reino, pues se la disputaban innumerables caballeros. También era muy citada la, para él desconocida, crisis, que debía ser epidemia de gravedad, pues se decía de ella que desaparecería en los próximos meses, pero mientras tanto seguiría dañando a España. Le intrigó un artículo que hablaba de un Faisán, noble ave, que en el texto desempeñaba un muy desairado papel de traiciones. Desconcertado, arrojó los papeles lejos de sí.

Por fin, un inmenso carro, al parecer tirado por caballos invisibles, de un color absurdamente llamativo, se acercó donde se encontraba.

Espantado, comprobó como una informe masa de brujas, trasgos y hombres ensangrentados, inconcebiblemente vueltos a la vida, y oliendo a alcohol de forma nauseabunda le saludaban y hasta le felicitaban por su atuendo. Nuestro hombre, de sí orgulloso del egregio porte que siempre había lucido, se debatía entre la satisfacción del reconocimiento a su apostura y el horror que le producían tantos engendros que, sin duda, hasta el día no habían caído en manos de la Santa Inquisición.

Arrastrado por la chusma, dio con sus maltratados huesos en la Puerta del Sol, y comprobó con horror que el corazón de la Villa había sido tomado por seres semejantes a sus compañeros de viaje, o a otros que pudo contemplar en el periódico que anteriormente rescató de la papelera, donde se decía de ellos que eran familia del presidente del gobierno, fuera lo que significara tal despropósito, y que en su espiritú dejaron muesca indeleble.

De repente, un grupillo de golfillos o mozalbetes, con evidentes síntomas de ebriedad, la emprendió con él, bombardeándole con los huevos de gallina tan preciados en sus tiempos. Buscó en el costado el frío y tranquilizador contacto de la empuñadura de su acero, pero, recordó con un íntimo lamento, como unos malencarados individuos se lo habían arrebatado, según creyó entender, mientras buscaban pruebas acerca de una tal “memoria histórica”.

Con tristeza, sucio y magullado, y un postrer pensamiento puesto en Doña Inés, se guío por las estrellas camino de su eterna morada, diciéndose a cada paso: “ ...ya me lo advirtió Romanones, joder, vaya tropa...”