"Los políticos y los pañales se han de cambiar a menudo... y por los mismos motivos."

Sir George Bernard Shaw

domingo, 15 de febrero de 2009


En las últimas semanas se habla sobre todo de espionajes, casos de corrupción y de monterías, temas muy conocidos por todos lo españoles desde hace demasiado tiempo.
Porque, para refrescar algunas memorias, no históricas, habría que recordar el último gobierno de Felipe González, con un buen puñado de dirigentes de la confianza de aquel presidente entre rejas, ministro incluido.
Referente a los espionajes, nada como rememorar la saña con que persiguió cierto juez al ejecutivo socialista, tras no ser nominado en un peculiar “Gran Hermano”, tal vez demasiado literal lo de Hermano, como ministro de justicia. La información que manejó el hijo del gasolinero, el hombre que veía amanecer, que me cuenten de donde la sacaba...
Pero, ¡oh sorpresa!, el mismo perseguidor en aquellos años de los Filesas, Malesas, GAL y demás, ahora confraterniza con sus antiguos y encarnizados enemigos. Y no lo hace de cualquier forma, no, no se come unas judías con langosta en El Tulipán, con la incendiaria de literatura ajena Cristina Almeida de testigo y comensal de gañote incluida. No, ahora acude a cacerías de grandes piezas, a saber por quien financiadas, a las que acuden ministros de su interés, fiscales adeptas al régimen, y hasta el jefe policial interesado en el caso que entre pezuñas se trae.
No seré yo quien entre a cuestionar de donde sale el dinero que paga el cinegético acontecimiento, que cada uno vende el culo a quien quiere, pero, no sé, me recuerda a los últimos años del franquismo, eso que hay quien da en llamar tardo franquismo, donde los más voraces del bien asentado sistema acudían en busca de mercedes y concesiones, que mas tarde, muerto el Caudillo, utilizaron para instalarse cómodamente en lo que ahora se viene en denominar “este país”. Recordemos, por poner un ejemplo, el tiro en el culo que Fraga propinó a cierta damita muy cercana a Don Francisco, (¿72 perdigones fueron, Carmencita?).
A lo que íbamos, es muy posible que dentro del Partido Popular hayan golfos, sinvergüenzas, chorizos y demás gentuza, no lo dudo, pero, hay que reconocer que con la que está cayendo en España, salgan estos sucios casos justamente en vísperas de dos comicios regionales y de la reválida europea, y que sea precisamente el juez galáctico, quien lo ponga de relieve ante la sociedad. Presumía Guerra, no el torero, el otro, de haberse cargado a Montesquieu, pero estos niños lo están dejando atrás.
Sólo le falta al caballero Z Paro emular a su amigo el gorila rojo Chávez para evitar incómodas citas electorales.

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